El reto de pasar las primeras Navidades sin alguien querido: “Llorar o estar callado no estropea la celebración”
La omnipresencia de los símbolos navideños, las cenas y comidas obligadas o las campañas publicitarias sensiblonas repetidas en bucle se sienten como sal en la herida; un recordatorio de que ese familiar o ese amigo ya no volverá a sentarse a la mesa — Navidad sin cuñados: ¿y si podemos aspirar a al...
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