Dimitte nobis debita nostra

La contemporaneidad personalizó la Nación, de suerte que los derechos del hombre se convirtieron en derechos nacionales. Y no hay persona más imponente que la persona-nación. Por ello, la violación de una nación es el crimen más grande. A medida que una nación toma el carácter de una persona y se co...
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