La salida alegre

La salida alegre

Le saludo un domingo por la mañana: “Hace mal día, hoy. No veo gente por la calle”, le digo. “Ya, ya…”, musita. Y continúo, mientras le pago: “Puede que sea el tiempo. O que la gente está fuera y es final de mes”. Se encoge de hombros y hace una mueca de escepticismo. Prosigo: “Porque, ¿cómo ves tú...

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