Un ladrillo, dos presos y una lección de Año Nuevo que no olvido

Un ladrillo, dos presos y una lección de Año Nuevo que no olvido

Esta no es una noche para terminar peleados. Hay que dejar los rencores en el año viejo. Los años nuevos hay que recibirlos con corazones ligeros, no pesados por enojos y tristezas...

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