Rayas, zanjas, jamones

Rayas, zanjas, jamones

Para inaugurarla, montó una juerga en su recién estrenada obra – aunque todavía no hubiese luz ni agua corriente para los escasos habitantes, detallitos nimios – a la que invitó a más de diez mil personas; había jamones de pata negra por cientos, según cuentan los testigos del sarao, y en las puerta...

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